SANTILLI ADMITIÓ QUE NO EXISTE CONSENSO VECINAL PARA EL ENREJADO

El ministro de Espacio Público reconoció ante la Asamblea del Lezama que no se realizó una amplia consulta con los vecinos y se comprometió a modificar el proyecto de puesta en valor y enviarlo a la Asamblea. Sin embargo, continúa sin dar respuesta al reclamo por las rejas.

El pasado miércoles 5 de junio,  integrantes de la Asamblea del Parque Lezama concurrieron a una nueva reunión con el ministro de Ambiente y Espacio Público. Desde un primer momento, se puso énfasis en la preocupación respecto al enrejado perimetral que pretende hacer el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires. Respecto a esta problemática, Santilli dio su palabra de no avanzar con el enrejado hasta que exista un verdadero consenso vecinal sobre el resto del proyecto de “puesta en valor”, aunque no ocultó la postura institucional del GCBA: Las rejas son parte esencial del proyecto pensado desde el macrismo para el Parque Lezama.

De la reunión, destacamos que:

• El ministro de  Ambiente y Espacio Público admitió ante la Asamblea del Parque Lezama que aún no se realizó una consulta amplia con los vecinos respecto a la cuestión del enrejamiento del parque. Además, reconoce el uso diferencial de este parque respecto a otros espacios verdes y su tradición.
• Desde el ministerio se comprometieron a enviar esta semana un anteproyecto que contiene modificaciones respecto de la propuesta original. Este será discutido por la Asamblea para generar una alternativa que respete el uso sociocultural que los vecinos le damos al Parque Lezama. Este compromiso se asume luego de reclamar por la falta de información (ver nota del 30 de mayo “INFORMACIÓN ¿PÚBLICA?: EL SECRETO TRAS LAS REJAS”).
• Los integrantes de la Asamblea aclararon su inquietud respecto a la construcción del consenso vecinal, haciendo hincapié en la necesidad de que se faciliten los canales de diálogo y se garantice la participación masiva de los vecinos. A su vez, exigimos al ministro que venga al barrio, que presente el proyecto a los vecinos y que garantice una discusión real dónde los usuarios seamos partícipes de las reformas que van a afectarnos.
• Santilli propuso continuar con una mesa de trabajo para analizar aspectos cuestionados del proyecto de “puesta en valor” del Parque. La Asamblea deberá avaluar esta instancia ya que seguimos sin lograr una instancia participativa real para todos los vecinos y sin solucionar el tema de las rejas.
• La decisión del enrejado del Parque no fue puesta entre las cuestiones posibles de ser rediscutidas. La apertura del Ministerio a propuestas o alternativas no alcanza a la cuestión de las rejas. Desde el Ministerio se comprometieron a consensuar las obras de puesta en valor  y  además acordaron realizar las obras de forma parcial en el Parque y a no cerrarlo en todo su perímetro para comenzar con la misma.

Hace semanas el Ministro había sostenido que contaban con la autorización de la Comisión Nacional de Museos, Monumentos y Lugares Históricos. En esta reunión también se desdijo sobre el asunto. En esta oportunidad rechazó la obligación del GCBA de someter el proyecto y el enrejado perimetral a la autorización de la referida Comisión Nacional. El Parque Lezama en su integridad es un Monumento Histórico y, por lo tanto, la Comisión Nacional debe autorizar toda obra que impliquen cambiar la funcionalidad o el paisaje de partes del Parque, como así también la restricción de acceso.

En reiteradas oportunidades la Comisión Nacional ha solicitado el proyecto de “puesta en valor” del Parque Lezama al GCBA sin obtener respuestas. En un informe realizado por dicha Comisión en el año 2008 se expresaba que las rejas no deben ser instaladas para impedir el uso público e irrestricto del Parque.

Por otro lado, desde la Asamblea nos preocupa también que el GCBA no tenga definida una solución habitacional adecuada para las familias que habitan en el Parque Lezama. Cuando se iniciaron las obras en el Parque Centenario, las familias que allí habitaban fueron desalojadas sin acceso a una vivienda digna.

La Asamblea continuará realizando actividades culturales y difusión en los barrios aledaños, entendiendo que las reuniones con funcionarios son sólo un frente más de lucha para lograr que el Parque siga perteneciendo a los vecinos. Nos resistimos a dejar que un gobierno tenga las llaves del espacio público e insistimos en la construcción participativa de un Parque que nos incluya y no que nos excluya a todos.

¡El espacio público es de todos y la decisión de cómo usarlo también!